Las aplicaciones móviles se han hecho muy populares en los últimos años, debido al enorme auge en el uso de teléfonos inteligentes o Smartphone. Todo negocio quisiera estar presente en estos dispositivos, pero ¿de qué forma? Mucha gente piensa en contratar la creación de una aplicación móvil, para que su negocio “salga” en los Smartphone, sin realmente valorar otras posibilidades, pero sobre todo sin hacer un estudio de factibilidad o utilidad de la aplicación móvil que se pretende desarrollar y simplemente dejándose llevar por el impulso o moda de querer tener una aplicación.

Primeramente, ¿Qué es una aplicación móvil y qué diferencia hay de una versión móvil de tu página de internet?

Una aplicación móvil es software que debes descargar e instalar en tu teléfono móvil o Tablet, la descarga se realiza a través Apple Appstore para iOS, Google Play para Android o Marketplace para Windows Phone. Una aplicación por definición debe tener una utilidad concreta, tu cliente o lector solo la instalará si sabe claramente para qué sirve y qué le aporta, es decir, requiere una voluntad firme por parte del usuario. El almacenamiento de los teléfonos móviles es limitado y a nadie le gusta quedarse sin espacio si no obtiene un beneficio a cambio.

Ejemplos claros de aplicaciones móviles con cierta utilidad por parte de los usuarios son WHATSAPP, Facebook, Twitter.

Un sitio web adaptado para móviles o una versión responsiva y no es más que tu propia página web adaptada a los formatos de tablet y smartphone. Esto facilita la navegación a los usuarios para que les resulte más sencillo acceder a los contenidos sin necesidad de realizar ninguna descarga y el usuario disfrutará de una experiencia de navegación mejorada por el solo hecho de visitar tu página de internet desde un dispositivo móvil.

Hecha esta distinción, necesitamos verificar realmente si tiene sentido crear una aplicación.

El hecho de que el usuario la pueda tener siempre a mano y visible por supuesto que tiene sus beneficios, desde la accesibilidad, rapidez, la imagen de nuestra marca, por lo cual es lógico que nos genere cierta curiosidad y nos den ganas de tener una aplicación propia y desde luego, nos gustaría que esta aplicación fuera de las más descargadas y populares, pero no siempre es así y aquí te comparto algunos factores a tener en cuenta.

Primeramente debemos de verificar la utilidad real de nuestra aplicación, ¿Por qué un cliente o lector de nuestro medio informativo debe de descargar nuestra aplicación? ¿Cuántas aplicaciones has instalado y casi al instante borras porque no les vez una utilidad real? Existen empresas que piensan que sus clientes ocupan una Aplicación para que estos puedan ver sus servicios, ¿Crees que realmente eso es importante y útil para tu cliente? No.

La originalidad de una aplicación es importante para que se pueda hacer viral, si crees tener una idea única, que sea útil a la gente, novedosa, divertida, no debes de dudar y manda hacer tu aplicación ya, contrata a una buena empresa que desarrolle a medida tu aplicación, pero si no cumples con este principio te recomendamos no hacerla ya que día a día se publican miles de aplicaciones, muchas son muy buenas y fracasan al no ser descargadas e instaladas, ahora imagínate una aplicación que no tenga algo de originalidad, novedosa, etc.

El Costo de desarrollo de una aplicación es un punto a considerar y algo que debes de tener muy claro, el hacer una aplicación no es barato, lleva tiempo y consume esfuerzo. Sin embargo en el mercado puedes encontrar páginas de internet que ofrecen hacer una aplicación a partir de una página web, donde lo único que hacen es enmascarar tu página de internet como si fuera una app, algo que no es digamos del todo útil y nada provechoso para tus clientes o lectores de medio informativo, la opción ideal cuando tienes una buena idea y algo que aportar es una aplicación a medida, realmente no hay cargos ocultos excepto los 80 euros al año aproximadamente que te cobrará Apple o 25 dólares en Google Play. Todo lo demás corresponde al gasto en desarrollo, diseño, hosting, servidores, etc. el costo total de una aplicación puede variar en función de muchas variables, pero aproximadamente considera invertir entre 15,000 pesos por plataforma y depende de la complejidad se podría ir fácilmente a los 30,000 pesos, y de ahí para arriba claro considerando que hay aplicaciones que cuestan varios miles de pesos, eso sí, no son precios  caros si se tiene en cuenta la cantidad de trabajo que conlleva crear una aplicación a la medida, pero sí debes conocerlo para  calcular los costes y la rentabilidad de tu inversión en el caso de que decidas ponerla en marcha.

Además, por norma general las aplicaciones no son estáticas, sino que obtienen información de fuentes externas, requieren bases de datos para almacenar la información y mucha programación y optimización para que funcionen de forma correcta, por lo que además de contar con el costo de desarrollo, necesitaras estar invirtiendo en su mantenimiento y/o mejoras posteriores.

Debes de considerar también a tu Competencia, te sugiero realizar un benmarking, compárate con tus competidores, verifica quienes tienen Aplicaciones y verifica cuanto éxito tienen, en el 2015 Google Play tuvo el doble de descargas que la tienda similar de Apple, existen informes que detallan que en todo el planeta se descargaron unos 200 millones de aplicaciones en la tienda virtual de Google, mientras que en la de iOS “tan solo” unos 100.

Se ocupa realmente realizar promoción, sin promoción es poco probable que tu aplicación sea descargada, existen empresas de desarrollo de aplicaciones que intentan vender a toda costa sus servicios y dentro de los argumentos expuestos son, necesitas una aplicación para que puedas fortalecer tu marca, tendrás más visibilidad, vas a aumentarás tus ventas, hazme un favor y cuando te topes con empresas que te expongan esos argumentos, pregúntales cómo y pásame su contacto, porque yo también quiero conseguir nuevos clientes con un mínimo de esfuerzo, porque a mí me cuesta bastante. Las acciones para fortalecer marca son necesarias para grandes compañías, ya que la mera aparición de su logotipo puede hacer recordar al gran público que existen, que están ahí, que son un referente, pero desde luego no son aplicables a un negocio pequeño o portal informativo con apenas unos cientos de visitas al mes.

En Conclusión, te recomendamos realizar una aplicación móvil solo cuando tengas muy claro que te va a reportar beneficios de algún tipo. Piensa que si tienes un negocio modesto o un portal informativo noticioso con apenas unos cientos de visitantes al mes, no solo no la necesitas, sino que es probable que a la larga te acarree algunos problemas.

Te recomendamos pensarlo detenidamente, antes de afrontar el gasto que implica el desarrollo de una aplicación, debemos plantearnos si realmente la necesitamos, te recomendamos no dejarse llevar por las modas. Tal vez mejorar nuestra página web y hacerla amigable al móvil sea una solución más barata y efectiva para nuestro propósito y finalmente te recomendamos hacer el siguiente ejercicio, deja detrás tu ego y responde a la siguiente pregunta: ¿Yo me instalaría esta aplicación?